Cinco minutos...
entre tus brazos.
La tierra
desaparece bajo mis pies,
y me anclo a tu nuca
desembocando en tus labios,
bebiendo casi con urgencia
ese sorbo más de vida.
Recuperar un poco el aliento
en la posada de tu boca,
donde vivo y muero
a un mismo tiempo.
Tiempo, tiempo...
A destiempo
y en silencio te amo,
siempre te amé a destiempo.
En los bolsillos
cargados me pesan
las horas muertas sin ti.
Pero no quiero pensar en nada
en ese momento.
Así que me hundo
de nuevo en tu cabello
y mis manos se abren
enredándose,
tratando de acariciar
hasta tu sombra,
impregnándose de tu olor,
y toda yo me vuelvo tú
y todo tú te vuelves yo.
Cinco minutos...
entre tus brazos,
y el tiempo devorando
ferozmente
a dentelladas,
robándonos
apresurado
trágicamente,
nuestros escasos
cinco minutos
entre tus brazos.
La tierra
desaparece bajo mis pies,
y me anclo a tu nuca
desembocando en tus labios,
bebiendo casi con urgencia
ese sorbo más de vida.
Recuperar un poco el aliento
en la posada de tu boca,
donde vivo y muero
a un mismo tiempo.
Tiempo, tiempo...
A destiempo
y en silencio te amo,
siempre te amé a destiempo.
En los bolsillos
cargados me pesan
las horas muertas sin ti.
Pero no quiero pensar en nada
en ese momento.
Así que me hundo
de nuevo en tu cabello
y mis manos se abren
enredándose,
tratando de acariciar
hasta tu sombra,
impregnándose de tu olor,
y toda yo me vuelvo tú
y todo tú te vuelves yo.
Cinco minutos...
entre tus brazos,
y el tiempo devorando
ferozmente
a dentelladas,
robándonos
apresurado
trágicamente,
nuestros escasos
cinco minutos
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